Cuando a una persona se le indica llevar a cabo una operación de prótesis de rodilla no se debe a una decisión tomada a la ligera. Lo más habitual es que se deba a que este paciente ha pasado por una serie de fases de enfermedad degenerativa articular, más concretamente degeneración del cartílago que recubre el hueso.

Las prótesis de rodilla se clasifican en función de cómo se realice la sustitución de los huesos afectados, pero las más habituales son las conocidas como prótesis totales de rodilla (PTR). Las PTR se fijan a la tibia por medio de una bandeja tibial metálica y al fémur a través de unos cóndilos, también metálicos. Entre ambos se sitúa una pieza llamada inserto y fabricada de un plástico (polietileno) que facilita la articulación de fémur y tibia. Si el cirujano lo considera oportuno, también puede sustituir la parte articular de la rótula por un componente de polietileno.

La fijación de los componentes al hueso puede ser usando cemento óseo o buscando la integración de estos al hueso (en función de la calidad ósea del paciente).

¿Qué es la cirugía de prótesis de rodilla?

La cirugía de prótesis de rodilla, también conocida como artroplastia o cirugía de reemplazo de rodilla es una de las cirugías óseas más comunes en la ortopedia. La cirugía de prótesis de rodilla puede ayudar a aliviar el dolor de rodilla causado por la artritis severa. También puede ayudarte a moverte más libremente.

Durante la cirugía, un cirujano ortopédico corta la parte dañada de la rodilla y la reemplaza con una articulación artificial hecha de metal o plástico. La articulación artificial se une al hueso del muslo, la espinilla y la rótula con un material especial, como el cemento acrílico.

Se suele recurrir a una prótesis de rodilla cuando el paciente padece osteoartritis, una de las razones principales por la que la persona se somete a esta cirugía. Es una afección relacionada con la edad y ocurre cuando el cartílago, el cojín entre la rodilla y las articulaciones del hueso, se rompe.

Consulta Prótesis de rodilla

Otras de las razones por las que se recurre a la prótesis de rodilla son:

• Artritis reumatoide: La artritis reumatoide es cuando el sistema inmune del cuerpo ataca y destruye el revestimiento de la rodilla.
• Las personas con las piernas arqueadas o “rodillas torcidas” a menudo se someten a una cirugía para restaurar la posición de la rodilla.
• Lesiones en la rodilla: Un hueso roto o ligamentos desgarrados alrededor de la rodilla a veces dará como resultado una artritis que causa un gran dolor y limita su movimiento.
• Pérdida de flujo sanguíneo: Los médicos recomendarán cirugía si la sangre deja de fluir a los huesos (una afección llamada osteonecrosis o necrosis avascular).

Tipos de prótesis de rodilla

Hay cuatro tipos principales de cirugía de reemplazo de rodilla:

• Reemplazo total de rodilla: Es la forma más común. El cirujano reemplaza las superficies del hueso del muslo y la espinilla que se conecta a la rodilla.
• Reemplazo parcial de rodilla: Si la artritis afecta solo un lado de su rodilla, esta cirugía puede ser una posibilidad. Sin embargo, es justo para ti si tienes ligamentos fuertes en la rodilla. El reemplazo parcial de rodilla puede realizarse a través de un corte más pequeño que el necesario para el reemplazo total de rodilla.
• Reemplazo de rótula: Reemplaza sólo la parte inferior de la superficie de la rótula, pero algunos cirujanos desaconsejan este procedimiento, ya que la cirugía de reemplazo total de rodilla tiene una mayor tasa de éxito.
• Reemplazo de rodilla complejo (o de revisión): Este procedimiento puede ser necesario si tiene artritis muy grave o si ya ha tenido dos o tres cirugías de reemplazo de rodilla.

Acerca de la cirugía de prótesis de rodilla

La cirugía de prótesis de rodilla, que puede durar de 1 a 2 horas, se ha vuelto tan precisa que los médicos pueden elegir entre una variedad de diseños de rodilla que se adaptan a su altura, peso y nivel de actividad. Las prótesis, como se les llama, están hechos de una variedad de materiales, que incluyen metal, cerámica o plástico. Están diseñados para permitir un movimiento fácil. Algunos implantes están hechos solo para mujeres, para que coincida con su anatomía.

Un diseño común de rodilla artificial reemplaza al LCP ( ligamento cruzado posterior ), ubicado en la parte posterior de la rodilla. Otro reemplaza el LCA (ligamento cruzado anterior). Algunas rodillas artificiales están diseñadas para el reemplazo parcial de la rodilla, mientras que otras están diseñadas para mantener el LCP y el LCA justo donde están.

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Prótesis de rodilla complicaciones

Las complicaciones de la operación de prótesis de rodilla no tienen que ver exactamente con la articulación que se va a proceder a sustituir, sino que son los que aparecen en todos los consentimientos informados previos a cualquier cirugía, siendo estos:

• Infecciones urinarias y respiratorias: Debido al uso de la sonda en el caso de las infecciones urinarias o porque existe la posibilidad de que se produzca la entrada de alguna bacteria durante la intervención.
• Aparición de coágulos: Tanto en las piernas, denominado trombosis, como en los pulmones, lo que llamamos embolias.

A pesar de ello, con el objetivo de disminuir las posibilidades de sufrir estos problemas, se suele utilizar medicación antibiótica y anticoagulante para reducir al mínimo las posibilidades de que esto ocurra.

De todos modos, cuando alguien se plantea las posibles complicaciones de una operación de prótesis total de rodilla, a lo que realmente se está refiriendo es al hecho de si todo va a quedar bien, si realmente va a recuperar su calidad de vida entre otros aspectos. Lo más habitual es que la cirugía de sustitución funcione perfectamente y la prótesis dure sin problemas la vida útil estimada de entre 15 o 20 años, pero hay casos en los que se pueden producir las complicaciones que indicamos en el siguiente apartado.

Consejos para evitar complicaciones tras la cirugía

Lo primordial en estos casos es hacer caso al especialista que nos ha tratado, pero del mismo modo, es importante seguir una serie de pautas que nos ayuden a conseguir el máximo beneficio de habernos sometido a una cirugía mayor como la operación de prótesis total de rodilla.

Entre otros aspectos, es recomendable ponerse en manos de un fisioterapeuta para que nos ayude en la rehabilitación, ya que la clave de éxito de esta intervención se encuentra en el trabajo que se realice durante el año siguiente a la cirugía. Además de lo mencionado, es importante lo siguiente:

• Mantener el peso: Del mismo modo que a la hora de tratar la artrosis de rodillaen los primeros estadios de la enfermedad es importante mantener un peso equilibrado para evitar sobrecargar las articulaciones, con la nueva prótesis es importante hacer lo mismo para evitar sobrecargas y sobreesfuerzos en la misma que puedan provocar un aflojamiento o acelerar su desgaste.
• Toma de medicación antibiótica:En los casos en que el médico nos lo haya prescrito, es vital hacerle caso para reducir al mínimo la posibilidad de infección de la prótesis, ya que de ser así, requerirá de una compleja intervención de sustitución, que si bien es viable, no es garante de máximo éxito.
• Evitar forzar la prótesis: Si bien las prótesis articulares son de una calidad técnica muy avanzada, sigue siendo una rodilla artificial y debe cuidarse sin forzarla en exceso, evitar algunas actividades deportivas e ir desenvolviéndose día a día poco a poco y de forma progresiva.

Toda esta información es recomendable contrastarla con el cirujano en cada caso concreto durante la consulta previa a la cirugía, para solucionar cualquier duda que se pueda tener. En el caso de que estés planteándote la posibilidad de someterte a la operación de prótesis total de rodilla con nosotros, a continuación encontrarás una forma de iniciar el proceso para conocer a nuestros traumatólogos.

¿Cuánto tiempo duran las prótesis de rodilla?

Las prótesis de hoy en día tienen una duración estimada de 20 años.